El portal propiedades.com en un artículo publicado el pasado mes, informó sobre cómo los precios para la compra de departamentos de 80 m2 en la Ciudad de México, con un valor aproximado de 2.6 millones de pesos, subieron en un 12%. Esto ha tenido que ver con una serie de factores que ha afectado los precios del real estate. La economía mexicana al cierre de abril tuvo una inflación de 5.8% que según analistas podría llegar al 6%.
De tal forma, que el mercado inmobiliario se ha visto afectado por el aumento de la inflación general sobre todo en el sector de la construcción, que ha sido afectado con la inestabilidad del tipo de cambio y el valor de las materias primas como el cemento, acero, concreto, metales, mobiliario, vidrio, elevadores, equipos de automatización y productos de importación. De hecho la el negocio de la construcción tuvo un crecimiento anual superior a 4% (un 8.7%), mucho mayor que los precios de la inflación general. Creando como consecuencia un fuerte impacto que va más allá de lo que implican por sí solos los costos de edificación.
Por un lado, en el sector de la vivienda, es cierto que desarrolladoras como Homex, Geo, Urbi, Sare, han comenzado un período de recuperación en ingresos gracias a un crecimientos de sus ventas pero que no ha tenido que ver con la disminución de los precios. Es importante mencionar que desarrolladoras medianas, también han logrado eficiencias operativas a través de los último años. En el sector corporativo sin embargo, se comienza a ver un congelamiento en el movimiento de los cientos de miles de m2 disponibles.
Es importante tener en cuenta, el impacto de la construcción en el mercado de la vivienda, el precio de la tierra, y la nueva política de los subsidios. Cabe destacar que las desarrolladoras medias han mostrado cierta solidez, lo que ha llevado a que departamentos cuyo valor es de $1.5 millones pesos aumenten su oferta pero sin que los precios dejen de subir.
Los aumentos tienen que ver con un combinación entre el precio de los insumos y el efecto del tipo de cambio. La inflación afecta al consumidor pues su capacidad de compra y de pago ante los banco, se mengua.
Fuente: El Financiero